Una mezcla entre música y creatividad ha marcado la carrera del alumni Camilo Benavente, egresado de la Facultad de Diseño UDD, sede Concepción. Manejar una agencia, dar clases, crear portadas y afiches, un podcast y ser el bajista de la banda penquista “Niño Cohete”, son algunos de sus proyectos. 

La música siempre ha sido la protagonista, y fue la razón que lo llevó a entrar a la carrera de Diseño en 2006. “Quería estudiar algo que me atrajera y que tuviera que ver con la otra área que me apasiona, que es la música. Siempre me imaginé haciendo posters para conciertos o portadas de discos”, explica Camilo. 

Cuenta que, desde el colegio, estuvo vinculado al mundo artístico y esas mismas conexiones lo llevaron a formar parte de “Niño Cohete” -agrupación que nace en 2010- como bajista. Tras recorrer el país y varias ciudades de Latinoamérica y presentarse en diferentes escenarios, entre ellos, Lollapalooza, en 2017 decidieron tomar un descanso que se prolongó hasta mediados de 2023. En medio de este receso, junto a ex miembros del grupo formaron “Mondomamba”, que lo mantuvo activo en el ámbito musical, hasta que retomaron los ensayos con la banda para celebrar los 10 años de su primer disco “Aves de Chile” con presentaciones en dos oportunidades en el Teatro Biobío, una vez en el Teatro Coliseo y, recientemente, en la última versión del REC (Rock en Conce).

En los últimos años, Camilo también se ha dedicado a la docencia en la Facultad de Diseño y, actualmente, imparte clases a los estudiantes de tercer año, en el ramo de “proyectos editoriales”. La experiencia la califica como gratificante y dice que siempre intenta ser un guía y traspasar su experiencia profesional. Destaca que el foco es “que los chicos también aprendan que en el diseño se pueden hacer hartas cosas”. 

Con una mirada hacia el futuro, explica que dentro de sus planes es seguir creando nueva música con su banda, continuar la productora en la que trabaja junto a su hermano con la que llevan adelante “Expo Game” y retomar el podcast “El poder del trazo” que empezó en la pandemia. En ese momento, Camilo lanzó 25 capítulos en los que entrevistó a ilustradores de varios países, donde ahondó en el proceso técnico, creativo y sus historias y logró el auspicio de varias marcas. Proyecto que espera renovar durante los próximos meses para seguir explorando esta faceta comunicacional que tanto disfruta.