Ignacio Alvear estudió la carrera de Enfermería en la Universidad del Desarrollo, donde recibió su título el año 2022. Fue entonces cuando se enteró del programa impulsado por la Dirección de Globalización UDD que permite tanto a alumnos como alumni realizar un doble grado en España y quedarse a trabajar en dicho país. Sin pensarlo mucho postuló, fue seleccionado y comenzó su proceso de trámites que lo llevarían al continente europeo, específicamente a la Universidad Camilo José Cela de Madrid, donde después de seis meses de clases en aulas y trabajo presencial con pacientes en el Hospital HM Sanchinarro, recibió su diploma y comenzó su carrera profesional.  

¿Qué fue lo que te motivó a postular a este programa de doble grado?  

La principal razón por la que decidí hacerlo fue la experiencia internacional que iba a vivir. El estudiar y trabajar en otro país resulta enriquecedor no solo para el ámbito profesional, sino que en lo personal también. Llegas a un lugar donde la cultura es distinta a la que estás acostumbrado, entonces eso también implica un desafío propio. Aprender de sus costumbres, de la manera en cómo hacen las cosas y de sus tradiciones finalmente te nutre de experiencia y te da otro punto de vista de las cosas, te pones a pruebas, te cuestionas y aprendes. Esa fue mi principal motivación, ya que además de estar adquiriendo experiencia laboral internacional, también lo estoy haciendo en lo personal.  

¿Cómo ha sido tu experiencia hasta ahora? 

Mientras estudiaba, me tocó hacer mi práctica en el servicio de oncología del Hospital HM Sanchinarro, donde mis compañeras se portaron muy bien conmigo, al igual que los tutores que tuve, de quienes aprendí mucho. Eso sí, trabajar en este servicio implica una demanda emocional muy fuerte, donde es necesario contar con herramientas porque te toca ver a pacientes enfrentar tratamientos muy duros, otros que fallecen y eso, inevitablemente, te afecta. Es importante acompañar a las familias en este proceso también, ya que cuando los doctores les entregan un diagnóstico, somos nosotros, los enfermeros y enfermeras, quienes nos quedamos con ellos apoyándolos y conversando, es por esto que uno debe formarse también en este tipo de labores, saber acompañar, contener y responder preguntas frente a estas situaciones difíciles que pueden estar pasando.  

Con respecto a esto, ¿sientes que la UDD te entregó herramientas para enfrentarte a estos escenarios?  

Sí, de todas maneras, tanto el conocimiento teórico en términos de medicamentos, exámenes y tratamiento como en el tema emocional. En cuanto a esto último, recuerdo muy bien que en la Universidad nos dieron las herramientas para enfrentar estas situaciones de manera óptima y respetuosa, desde cómo informar al paciente hasta la contención que se les entrega a ellos y a su familia. La formación que tuve en la UDD me ha ayudado mucho para mis estudios y trabajo acá en España.   

Durante todos estos meses, ¿has tenido algún tipo de choque cultural ligado a lo profesional? 

Sí, me causa mucha impresión el poco conocimiento farmacológico que tienen los enfermeros acá, ya que en Chile nos enseñan rigurosamente este tema en nuestra carrera, todos los nombres, funcionamientos y alternativas de tratamiento, por lo que podría decir que cuento con una formación un poco más completa en ese sentido. Otra cosa que me ha llamado la atención es el uso de la povidona yodada, ya que es algo que yo pensaba que estaba obsoleto y que prácticamente ya ni se ocupaba, pero aquí la utilizan mucho, curan casi todas las heridas con esto. Son cosas a las que todavía me estoy acostumbrando.  

¿Cuánto tiempo te proyectas en España?  

Seguiré trabajando en el Hospital HM Sanchinarro por cuatro años más y eso me tiene muy emocionado porque, como realicé mi práctica ahí, ya conozco un poco el ambiente y el funcionamiento, pero ahora lo estaré viviendo desde el punto de vista de enfermero titulado, lo que implica desenvolverme de otra manera, adquirir experiencia y seguir aprendiendo de los nuevos desafíos a los que me seguiré enfrentando día a día.  

¿Tienes planes de especializarte en algún área en particular? 

Sí, he pensado mucho en eso. Me llama la atención todo el tema de los rescates y las situaciones extrahospitalarias, y como la mayoría de este tipo de cosas en España son operadas por el ejército y la armada, no descarto ejercer mi profesión ahí o, incluso, trabajar en ambulancia. Lo extremo siempre me ha llamado la atención, pero son cosas que iré decidiendo con el tiempo y según la experiencia que vaya adquiriendo.