Nuevos horizontes de la profesión de abogado
El destacado prefesor de la Facultad de Derecho. Sr. Raúl Campusano Droguett, nos entrega algunas reflexiones sobre los nuevos campos laborales a los que pueden acceder hoy día los abogados.
Las revoluciones científicas y tecnológicas, los avances en transportes y comunicaciones, el desarrollo de Internet y de la biotecnología son solo algunas de las profundas transformaciones que está experimentando el mundo en estos primeros años del siglo XXI. Y vendrán otras y aparecerán nuevas realidades y desafíos. Frente a este escenario todas las disciplinas se encuentran en procesos permanentes de actualización. El derecho no es ajeno a esta realidad y es así como las nuevas generaciones de abogados entienden la necesidad de conocer y dominar los nuevos lenguajes, como es el lenguaje de la ciencia, de la informática, de la economía y del comercio. También, por cierto el manejo de idiomas, empezando por el Inglés, pero probablemente pronto haya que agregar el Mandarín y otros.
Los procesos de globalización requieren de abogados que entiendan y se desenvuelvan fluidamente en entornos internacionales y multiculturales. Debe conocer las bases de los distintos sistemas jurídicos del mundo y comprender la forma de hacer negocios y resolver disputas en contextos distintos y cambiantes. También debe comprender las nuevas realidades que traen aparejados los avances en ciencia y tecnología. Es difícil que pueda asistir jurídicamente en forma idónea sino comprende los aspectos básicos del emprendimiento de su representado. La firma de tratados de libre comercio genera nuevos escenarios tanto en el derecho aplicable como respecto del procedimiento en caso de diferencias. Los avances en biotecnología requieren comprensión del fenómeno para proponer y aplicar legislación a su respecto.
El mundo actual y futuro prometen una amplia gama de posibilidades para los nuevos abogados, pero, de la misma forma, requieren de éstos una actitud abierta, curiosa y emprendedora para afrontar estos desafíos y escenarios nuevos. El mundo actual y futuro genera un contexto de cambios permanentes y se requerirá la capacidad de actuar eficazmente sobre realidades en procesos dinámicos. Esto abre posibilidades inéditas para aquellos que estén preparados y dispuestos a avanzar aprendiendo en forma permanente.