En esta oportunidad ahondaremos en relación a lo que el candidato puede hacer para generar un cambio significativo. Pondremos el foco en 3 situaciones y veremos las posibles razones de por qué no existe un segundo llamado:

1. Enviar muchos CV y no recibir un llamado de vuelta.

Más allá de la cantidad de CV´s que enviemos, tenemos que fijarnos en qué tan acorde es nuestro perfil al que la empresa busca. Te recomendamos postular siempre a aquellos cargos a los que realmente cumplas con los requisitos. De todas maneras, puedes postular a puestos donde no apliques completamente, pero obviamente será menos probable que se contacten contigo. Piensa en tus habilidades, conocimientos y experiencia como profesional para saber si realmente tu perfil se adecua. Luego, envía tu CV junto a una presentación personal breve y una motivación por entrar a la empresa.

2. Me hacen el primer llamado pero luego no sigo avanzando.

Cuando estés buscando trabajo lleva un registro de todas las empresas y posiciones a las que has postulado, junto a la fecha en que lo hiciste. Al momento del llamado, estarás más preparado y sabrás de qué se trata, lo que te dará una ventaja en relación a otros candidatos que podrán sonar menos interesados por el cargo. Con este llamado, el reclutador intenta conocerte un poco más y realmente saber si eres el candidato indicado para avanzar en el proceso de selección, ya que muchas veces la búsqueda cuenta con puntuales requisitos excluyentes. O bien, quizás espera conocerte más en la entrevista personal, por lo que en el llamado telefónico solo le interesará saber tu disponibilidad para coordinar. Puede que también te pregunten acerca de tus expectativas de renta, ya que es necesario para no perder el tiempo y saber si éstas están alineadas con lo que la organización está dispuesta a pagar.

3. Fui a la primera entrevista pero después no me volvieron a llamar.

Lo más importante para generar este cambio es intentar tener el mejor desempeño e impacto con el psicólogo o el futuro empleador en la entrevista presencial. Es fundamental en esta instancia recalcar la preparación antes de asistir a la reunión, partiendo por el conocimiento de la empresa u organización a la cual se postula.

Las preguntas típicas que pueden surgir en una entrevista de trabajo son: ¿Por qué elijo esta empresa para trabajar?, ¿En qué te destacas?, ¿Cuáles son tus fortalezas y tus aspectos a mejorar en el corto plazo?, ¿Cuál es tu mayor logro profesional? Cuéntame una situación donde te haya tocado trabajar en equipo: cómo se resolvió, como te sentiste, si vuelve a ocurrir lo mismo qué harías, y por qué fue la más difícil. ¿Cómo te vez de aquí a 3 años en tu vida?, ¿Cuál es tu pretensión de renta (puede ser acá o por teléfono)?

El reclutador intentará hacer un match entre lo que hay para ofrecer y tus expectativas, por ejemplo preguntando por cuáles son los aspectos fundamentales en tu trabajo ideal.

Para finalizar, hay que destacar que existen variables que están fuera del alcance de los candidatos, las cuales pueden ser la razón de por qué no me llaman. Dentro de éstas tenemos -por ejemplo-que que hay una sola posición y muchos candidatos. La segunda, es que la empresa puede decidir dar de baja la búsqueda por distintas razones, la más común es que el puesto se cubra de manera interna con un candidato al que le dieron la oportunidad de seguir creciendo o con un referido, o también puede ser que finalmente no les alcance el presupuesto para seguir con la búsqueda.

Te invitamos a aclarar todas tus dudas con Alumni Santiago o Concepción, para avanzar con el proceso de búsqueda de empleo de la manera más segura y efectiva posible.

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